viernes, 20 de diciembre de 2013

DE GENIOS, MUSAS Y CATÁLISIS (I).....Odiseas espaciales en un fluido rosáceo

El arte es caprichoso y cabrón como él sólo.

Cuando una persona tiene necesidad de creación, se pasa toda la vida dependiendo de la puñetera inspiración, de la IDEA, del MOMENTO preciso o precioso.

Y eso es una putada, porque le puede suceder cuando sea, es decir, la “bombillita” se puede encender mientras estás trabajando, conduciendo, comiendo, o haciendo “guarreridas”, sean de las buenas o de las malas. Si es que existen “de las malas”, claro.

….Y lo peor, o lo mejor, no lo sé, es que hay que parar lo que demonios sea que estés haciendo; porque si no lo haces, sino te pones inmediatamente a CREAR, pasa el momento, la magia, el duende, el “flojisto” (cada cultura e incluso época, por muy atrasada o bárbara que haya sido, tiene una palabra para definir ese momento de inspiración).

Y a qué viene todo esto….?

Creo firmemente que en todo proceso creativo/artístico que albergue algo de pureza, participan tres clases de  elementos: el artista o “genio” (depende del caso), la musa/o y el catalizador.

Del artista, genio, creador, “iluminado” o como queráis llamarle, no hace falta hablar, pero sí un poco de los otros dos y, como iremos viendo (e iréis sufriendo), mucho de alguno de ellos.

El papel del catalizador, no es muy diferente que el que realiza la sustancia del mismo nombre en una reacción química, es decir, es la persona, cosa, elemento o “brebaje” que acelera el proceso. Muchos lo atribuyen a las drogas, que hacen más “ideal” el proceso creativo, pero pueden ser cosas más mundanas, como un tipo de iluminación, la comodidad de tu escritorio, acompañarte de un buen café….en definitiva, lo que nos hace estar cómodos y que todo fluya mejor.

Hay quienes trabajan sin catalizador, esa especie de artistas o genios malhumorados, insoportablemente hartos de sí mismos y de todo lo demás, incapaces de entender nada ni nadie fuera del radio de acción de su genialidad, de sus ideas, de su mundo…..Pero esto no toca hoy, hablaremos otro día de estos seres atormentados, porque, en realidad, son los que más me atraen, aunque es un tema delicado, ya que muchos de ellos no han hecho precisamente el bien…..Y bien pensado, releyéndome, mejor lo dejaremos aparcado (quizá si algún día consigo que me paguen por escribir y puedo permitirme el lujo de perder vida social porque estoy forrado :-P)

Y llegamos a las Musas, que, por hoy, me dicen que pare….

CONTINUARÁ...

lunes, 16 de diciembre de 2013

VOLVER A LA VIDA

¿Quién no ha tenido un vínculo enfermizo?

¿Quién no ha sido la parte débil?

¿Quién no ha sido el que quería más….el que necesitaba menos?

¿Quién no ha dado sin recibir…..?

Esperando cambios, esperando cariño, esperando…..algo

¿Quién no ha sido fiel a la esperanza aun sabiendo que no era real?

¿Quién  no sufrió daño, hasta el punto de convencerse a sí mismo de ser el responsable del daño recibido?

¿Quién no se castigó por no ser capaz de soportar más castigo?

¿Quién no defendió lo indefendible, lo ruin, lo mísero…..envolviéndolo en incompresible comprensión?

¿Quién no desechó consejos de quien le quiere, despreciándole para entregarse a quien le vampiriza?

¿Quién no se humilló, creyendo que aún así no hacía suficiente?

¿Quién no se sintió merecedor de lo que se le daba, por muy poco que esto fuese?
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Quien sepa de qué va esto, también debe saber que se sale y se puede VOLVER A LA VIDA...ahí fuera.

Y llorará oyendo estos versos, como solo llora el alma que se entregó por nada...


….porque pocos poemas lo expresan mejor que este lamento maravilloso obra de Pink Floyd, envuelto en su sonido hipnótico, entremezclado con la voz rasgada de David Gilmour, que parece clamar hacia el infinito que, a pesar de casi haber muerto por dentro, al final, lo que necesitabas, era encontrarte a ti mismo.


“WHERE WERE YOU WHEN I WAS BURNED AND BROKEN
DÓNDE ESTABAS TU CUANDO YO ESTABA QUEMADO Y DESECHO
WHILE THE DAYS SLIPPED BY FROM MY WINDOW WATCHING
MIENTRAS MIRABA LOS DÍAS PASAR POR MI VENTANA
AND WHERE WERE YOU WHEN I WAS HURT AND I WAS HELPLESS
Y DONDE ESTABAS CUANDO ESTABA HERIDO E INDEFENSO
BECAUSE THE THINGS YOU SAY AND THE THINGS YOU DO SURROUND ME
PORQUE LAS COSAS QUE DICES Y HACES ME RODEAN
WHILE YOU WERE HANGING YOURSELF ON SOMEONE ELSES WORDS
MIENTRAS TE COLGABAS EN LAS PALABRAS DE ALGUIEN MÁS
DYING TO BELIEVE IN WHAT YOU HEARD
MURIENDO POR CREER EN LO QUE HABÍAS ESCUCHADO
I WAS STARING STRAIGHT INTO THE SHINING SUN
YO EMPEZABA A IR DIRECTO AL SOL BRILLANTE
LOST IN THOUGHT AND LOST IN TIME
PERDIDO EN EL PENSAMIENTO Y PERDIDO EN EL TIEMPO
WHILE THE SEEDS OF LIFE AND THE SEEDS OF CHANGE WERE PLANTED
MIENTRAS LAS SEMILLAS DE LA VIDA Y LAS SEMILLAS DEL CAMBIO ERAN PLANTADAS
OUTSIDE THE RAIN FELL DARK AND SLOW
AFUERA LA LLUVIA CAÍA LENTA Y OSCURA
WHILE I PONDERED ON THIS DANGEROUS BUT IRRESISTIBLE PASTIME
MIENTRAS REFLEXIONABA EN ESTE PELIGROSO PERO IRRESISTIBLE PASATIEMPO
I TOOK A HEAVENLY RIDE THROUGH OUR SILENCE
TOME UN PASEO CELESTIAL A TRAVÉS NUESTRO SILENCIO
I KNEW THE MOMENT HAD ARRIVED
SUPE QUE EL MOMENTO HABÍA LLEGADO
FOR KILLING THE PAST AND COMING BACK TO LIFE
PARA MATAR AL PASADO Y VOLVER A LA VIDA
I TOOK A HEAVENLY RIDE THROUGH OUR SILENCE
TOME UN PASEO CELESTIAL A TRAVÉS NUESTRO SILENCIO
I KNEW THE WAITING HAD BEGUN
SUPE QUE LA ESPERA HABÍA COMENZADO
AND HEADED STRAIGHT INTO THE SHINING SUN
Y ME DIRIGÍ DIRECTO AL SOL BRILLANTE”




lunes, 28 de octubre de 2013

28 DE OCTUBRE

No me cuesta demasiado imaginarte hace años...

En alguna verde campiña, o a la orilla del río. Riendo y saltando entre ramas, árboles, rodeada de toda clase de pequeños seres juguetones.

En libertad.

Sobre todo, libertad de pensamiento, porque la naturaleza, en cierto modo, es justa. No se entromete.

No te pone zancadillas. Te trata como la tratas. Si plantas algo y lo cuidas, normalmente da sus frutos.

Si tratas bien a un animalito, él te devuelve cariño y fidelidad..... o se convierte en un rico alimento.

Si cuidas el río, fluye cristalino, riega tus campos y refresca los veranos abrasadores.

Las piedras no te atacan, se dejan ver y, si sabes gestionarlas, se pueden convertir en sólidos muros protectores, fuentes, pozos, hogares….

Todo es, en cierto modo, justicia, solidaridad, colaboración para el mutuo bienestar (que no beneficio).

Y esos son los valores que la naturaleza te enseña.

Honradez, integridad, rectitud, dignidad, bondad, conciencia, desinterés, desprendimiento, decencia, moderación, honor, compostura, solidaridad, modestia....

COMPARTIR.
 

Cuidar a las personas y a las cosas con mimo, sabiendo que cada pertenencia es un fruto único de un árbol que se puede agotar.

Sabiendo que, en el fondo, todo lo que se nos da son regalos inmerecidos, y que debemos hacernos dignos de cada cosa que se nos otorga, sea material o inmaterial, sea una planta, un coche, un viejo reloj o una amistad. 

Todo hay que dignificarlo, porque no existe motivo real para que no se lo den a otro en nuestro lugar. Son regalos.

Y yo soy perro viejo a la hora de mirar en unos ojos desamparados que necesitan el refugio de nuevas ilusiones. 

Quizá por mis raíces, arraigadas en la tristeza de dejar el hogar buscando un futuro para los tuyos. Porque desde muy pequeño vi esa expresión en la mirada de mis abuelos y padres, que, al fin y al cabo, casi nunca estuvieron donde les gustaría estar, pero aun así, seguramente desgarrados en su alma, se mantuvieron fuertes para que yo creciese ajeno a las penas, al dolor.......manteniendo intactas las ilusiones de que siempre iba a poder con todo. 

Con todos.

..........

Yo me encontré con tu mirada, justo cerca de estas fechas, hoy hace 14 octubres.

Ni lo buscaba, ni mucho menos, lo merecía.

Simplemente pasó.

Ese día, tras nuestra primera breve conversación en la sala de una vieja universidad, entre gente que se volvió invisible, mi vida se acabó tal y como la conocía.

Y en días posteriores, en cada clase, en cada café, en cada conversación que cada vez se extendía un poquito más, me di cuenta de que tu campiña era mi mar, y tus ilusiones por la vida y el futuro eran las que yo tuve alguna vez de niño y que la maldita ciudad y su sociedad del "yo más que tú" poco a poco me estaban arrebatando, mientras me infectaban esas enfermizas ansias de medraje material, impersonal, y vacío.

De repente el aire fresco me golpeó en la cara, y me recordó que vine a la vida a vivir.

Tú no lo sabes, o no lo crees, pero, para bien o para mal, a tu lado me he ido convirtiendo en lo que soy.

Porque tu sonrisa y tu alegría son mi alimento.

Porque nuestra inocencia nació de la misma naturaleza.

Porque el mundo me estaba engullendo y tú no lo permitiste.

Siempre te digo, cuando me preguntas con ojos ansiosos de soluciones mágicas, que lo que me hace ser fuerte es que en realidad nada me importa demasiado.

Y si me paro a pensar, creo que te miento un poco. Porque, en realidad, casi nada me importa demasiado desde que estás en mis días y mis noches.

Y lucharé cada día para seguir siendo digno y merecedor de tu amor incondicional. Porque lo siento cada segundo, cada milésima.

El de verdad, no el amor de los gestos o los detalles.

El que se ve cuando te despiertas y me descubres a tu lado.

El de descubrirte observándome cuando no  me doy cuenta.

El que no se puede disimular.

El de seguirme al fin del mundo desde hace años.

El de sentir que, haga lo que haga, subirás conmigo al caballo sin preguntar por qué, ni a dónde, ni para qué demonios...

Yo solo tenía una ilusión en esta vida, y era la de vivir una gran historia de amor.

Una ilusión que llegué a pensar que era una utopía, un cuento. Algo que no era para mí.

Y tú eres esa gran historia. Mi historia. Mi gran regalo.

Podría estar escribiendo horas (igual que hablando, sé que lo sabes), pero pasaría este día, en el que aunque sé que me dijiste que no es necesario, quiero hacerte un regalo.

Confieso que no sé cómo acabar.

E intuyo que es porque no quiero que termine nunca….



martes, 22 de octubre de 2013

EL SACO



Siempre quise tener un saco de boxeo.

Como mucha gente, supongo.

Es curioso la cantidad de veces que he oído esa frase. Para el estrés, dicen…

Bien mirado es ideal, llegas a casa o a donde quiera que esté el saco, después de un duro día de trabajo y de mierdas de aguantar gente y vas y revientas al saco a ostias.

Y va el saco, el muy gilipollas, y a cada leche que le das, se aleja para luego volver mansamente hacia ti para que le vuelvas a dar de lo suyo.

Y cuanto más le das, más va y viene, va y viene, en una especie de  baile grotesco.

Y así un rato cada día, cuando te apetece…

Cuando lo decides tú, porque el saco, piensas, no tiene sentimientos. Y además, si los tuviese, tampoco se queja y, cada vez que vuelves, ahí está, igual que el día anterior, y el otro y el de más allá.

….Esperando a que lo golpees. A que vuelques sobre él todos tus problemas y frustraciones.

Y como es un saco, ¿por qué no?, también descargas sobre él tus miedos y tus odios….Ya que estamos, toda la porquería y miseria que te sobre. Porque él todo lo absorbe.

Y  no se queja.

Y vuelve…

Si esto fuese una fábula, ahora vendría la moraleja....

Es decir, que si un día el saco se rompe... que si establecemos una hábil metáfora para compararlo con las personas que no cuidamos..... que si una lección de vida….

Pero no.

No es una fábula ni un cuento.

El saco sigue ahí. Para que le des de ostias a diario.

Y si se rompe, te buscas otro y lo sigues reventando.

Porque es un saco, y es para lo que vale.



lunes, 3 de junio de 2013

NOBLE JUEGO, AFOUTEZA Y CORAZÓN.

No soy excesivamente fanático del fútbol.

Me gusta. Diría que me encanta. Veo semanalmente liga española, inglesa, italiana, alemana, portuguesa, francesa, holandesa, rusa….Conozco miles de jugadores desde los 8 ó 9 años y soy asiduo a las gradas de 2ªb, 2ª a y primera división desde que era un niño.

Quizá debería corregir mi frase inicial.

SÍ, SOY UN FANÁTICO DEL FÚTBOL.

Lo que no soy es un fanático de unos colores. Nunca me han gustado los colores, las siglas, las pertenencias, los dogmas, las banderas, la militancia...

MILITAR me parece un verbo repugnante.

Tengo simpatías. Crecí rodeado de ilusión con el Celta de Pichi Lucas, Vicente, Manolo, Ademir, Maraver, Maté y compañía. Pero también me cautivó el Deportivo de Vicente, Jorge, Jose Ramón, Raudnei. Como buen niño de la generación X, vibré con Naranjito y el mundial 82, y tuve ídolos como Quini o Julio Alberto, lo que me convirtió desde pequeño en simpatizante del Barça y, por consiguiente, rival a muerte del Madrid.

Yo vivía en un pueblo pequeñito, donde no había más que un equipo de 3ª que tuvo sus gloriosos años en 2ª B en los años 80, y tuve la oportunidad de ver en la Copa del Rey equipos como el Sevilla o la  Real Sociedad, que por aquel entonces ganaba ligas. En Vigo o Coruña no os lo podéis imaginar, pero en una ciudad como Villagarcía de Arosa y para un niño acostumbrado a ver a sus vecinos jugar, el impacto de estos eventos fue tan grande que me marcó para toda la vida. Ir a ver a tus ídolos de primera división y , por qué no, soñar con que tu equipo les marcase un gol. Sí, solo un gol, nadie hablaba de ganar o empatar, ni se nos ocurría.

No sabía de rivalidades de ciudades, de odios, de desear la derrota del vecino. Y mucho menos de insultos, disturbios ni política. Eso no estaba en mi mundo de niños de aldea. Solo quería ver y jugar, ver y jugar y jugar, jugar…fútbol.

Cuando llegué a Vigo, allá a principios de los 90, me enganché un poquito más a ese entrañable equipo “ascensor”. Un año en primera, otro en segunda y así sucesivamente. Un equipo formado por HOMBRES. Vicente, Atilano, Patxi Salinas, Alvelo, Gudelj, Ratkovic, Pachi Villanueva, el Flaco Gil…. Gente que veías por la calle y te imponía respeto. Quizá no eran los mejores jugadores del mundo, pero eran nuestros, y terminaban exhaustos (o a ostia limpia) los partidos. No se podía pedir más. Solíamos lamentar nuestra mala suerte, pero cada domingo salías satisfecho de los partidos, no había ni una gota más que exprimir.

A finales de los 90´s, mi situación económica de estudiante universitario fuera de casa, me tuvo unos años alejado del campo de fútbol. Vamos, que no me podía permitir pagar el carnet y ahí, justo ahí, comenzó a cambiar todo.

Para más mala suerte, coincidió con los mejores años de la historia del Celta, con Mostovoi, Mazinho, Karpin, Revivo, Makelele, etc…

Cuando mis “amigos” volvían de estadio, yo, después de haber visto el partido en el bar, esperaba ansioso su llegada para comentarlo, saborearlo, que me trasladasen un poco del ambiente de la grada. Pero para mi sorpresa, me acostumbré a oír cosas como “tú no puedes opinar de esto y lo otro porque no eres socio” o “¿me lo vas a decir a mí, que estaba en el campo?. Y la peor de todas, cuando intentabas quedar con amigos para ir un día a ver un partidazo al bar del Madrid, Barça, Manchester, etc….me decían “a mí ya me llega con el futbol de Balaidos, yo ya veo el mejor futbol de la liga”

EMPEZABA LA “MILITANCIA”

Y yo me empecé a sentir distinto….

Volvió a mi mente ese niño del pueblo, esos domingos viendo a mi equipo en una grada de cemento, y escuchando el carrusel por la radio, sin que nadie me llamase Madridista, Barcelonista, esquirol o “comepipas”.

Y pensé que en todos los pueblos y ciudades hay niños, y que son del Deportivo, y del Betis, y del Ferrol y de la Cultural Leonesa si me apuras…..Y que todos tienen la misma ilusión, la del gol de su ídolo, de su equipo.

Y creo que si lo pensáis, y os miráis al espejo, en el fondo sabéis que todos los niños merecen de vez en cuando ese instante de felicidad.

Hablaremos en el bar, en las fiestas, donde queráis. Y nos reiremos de los “turcos” ,de Lendoiro, de si desaparecen, de sus pufos, y lo pasaremos bien. Pero precisamente por eso, por reír, por la coña, porque ES SOLO FUTBOL. Y por que la guasa es sana y lo intrascendente nos recarga el depósito para la vida de verdad.

Pero en el fondo, no me alegro, porque sé que hay gente buena, niños, currantes explotados. Exactamente los mismos que en Vigo, Madrid, Pontecaldelas o Cancún, personas que, al igual que nosotros, se merecen la alegría de un gol de su equipo, por muy pequeña e insignificante que sea.

Sí...soy del Celta, me veréis en Preferencia el año que viene, pero quiero que el Depor vuelva a primera cuanto antes.

Y GANARLES.



jueves, 30 de mayo de 2013

SER FELIZ ES UNA MIERDA....

Para tíos como yo….profundos, reflexivos, observadores, fanáticos de la exagerada atención al detalle.…

Tíos que disfrutamos con la nostalgia, la decadencia, quejándonos de la falta de cariño, habituales del lamento por la ausencia de amor…

Nos gusta inspirar profundamente, incluso misteriosamente (para que nos vean y nos pregunten)…. dejar la mirada perdida sobre el horizonte que se adentra en el océano.

Nos encanta señalar…remarcar lo substanciales que son los demás, lo materialistas. Por qué no decirlo: Lo BORRICOS que vemos a casi todo el mundo

Disfrutamos presumiendo que oímos música de verdad y no la bazofia de hoy en día.

Nos relamemos hablando de cine, actores y directores que poca gente conoce para diferenciarnos de la chusma.

Rozamos el éxtasis parafraseando citas de libros de culto, que por supuesto no fueron ni serán nunca  “Best Sellers” (por favor, a quién se le ocurre, escritores vendidos al sistema, que pretenden vivir de su trabajo…que ofensa!)

Para tíos como yo, cuando llegas a los treinta y muchos (ejem…), y te das cuenta de que no te sientes así, te notas raro, que algo falla, que te esfuerzas pero no encuentras la inspiración de escribir algo profundo, hiriente, corrosivo, intoxicador…..subversivo.

 No se digna a levantarse la azarosa pluma como un martillo para golpear a la sociedad.

Te levantas con ánimo, sin echar de menos el ayer, rodeado de afecto, de cariño, de amor….

Disfrutas cada bocanada de aire, no te paras a observar nada, ni amaneceres, anocheceres, estrellas fugaces ni brumas marinas que te evoquen pensamientos de tiempos pretéritos que anhelabas mejores.

Me descubro ( y me sorprendo) buscando lo mejor de los que me rodean, pensando que, al fin y al cabo, el ser humano es química, y reacciones, choques aleatorios de partículas y neuronas y, siendo así…¿cómo no vamos a cometer errores, decir tonterías y, claro, ser todos un poco borricos? ¿Cómo no, ante tan caprichosa entropía interior?

Sientes empatía….PUTA EMPATIA….¿Qué está pasando aquí?

Han venido los Ultracuerpos?... los Hare krishna?...los Teletubbies???

De repente me rio con absurdas series de TV sobre patríos vecindarios ridículos. Me sorprendo emocionado un sábado por la tarde por los logros y afán de superación que permiten a Steve Martin gestionar una familia numerosa, conciliando de manera heróica la vida laboral y familiar (Y por supuesto sin descuidar sus obligaciones matrimoniales).

 Me emociono (y eso sí que es jodido), con los monólogos iniciales y finales de Anatomía de Grey, convirtiendo en casi insuperable la sensación de derrumbarme ante las melodías pop teñidas de fresa y colores de sus canciones de fondo. (“Debe ser tan difícil ser mujer en un mundo de hombres”, pienso..)

“Teeee pintaron pajaritos en el aire…”, tarareo ahora (mierda)

Empiezo a divagar en mi mente sobre ciertos libros y me digo a mí mismo, “bueno, si los lee tanta gente, algo tendrán”, en lugar del habitual “Vade retro, Satanás”, que tanto disfrutaba emitiendo a través de mis ex profanos, herejes, pecadores y antiguamente combativos labios.

De repente me parece que Reverte es un poco duro, que quizá Vargas Llosa no es tan facha y que Paulo Coelho posiblemente tenga un trocito de la llave de la felicidad.

Me planteo ir al médico a ver si tengo algo. Yo que sé, que me mire, me revise, me haga pruebas, análisis…..me EXORCISE….Pero pienso que ya  hay demasiadas colas en la Seguridad social, que no voy a aumentar el gasto público del país yendo al ambulatorio, y que al final, los médicos, como funcionarios que son, están sufriendo con tanto recorte, y no voy a cargarlos innecesariamente con mis problemas, cuando ese ratito podría estar tomándose un bien ganado café.

Al final opto por la solución fácil y gracias a una explosiva mezcla entre alarde y arrebato de desconocida valentía, me sitúo delante del espejo….

Y me encuentro a mí mismo, con cara de gilipollas, sonriendo.


MIERDA.



miércoles, 15 de mayo de 2013

LO QUE NO PENSAMOS...


Lo que no pensamos….¿os habéis detenido alguna vez en esto?

Los “muros” en la cabeza, las  negaciones, las vendas en los ojos. Cosas que nos da miedo decir, afirmar, negar. Opiniones que nunca damos para no salirnos de lo normal, para no decepcionar, para no perder amigos, el tren social….para no salir de la “rueda”.

Solo es una palabra, un gesto, un acto. Es hacerlo/decirlo y ya está. Pero no podemos….nunca podemos.

Todos ocultamos cosas que suponemos en los demás, que SABEMOS seguro que hacen, que piensan, pero de las que nunca se hablará.

Convenciones sociales, cosas del tipo “con esta persona no saques este tema, ni este otro”.

Ir a reuniones sociales/fiestas que no nos apetecen. Aplazar semana tras semana citas con personas que no nos agradan, en lugar de cerrar esa relación, aún a costa de vivir con un yugo permanente sobre nuestra conciencia, y el consecuente estrés que nos provoca que esa cita pendiente y esa persona que no queremos ver siguen ahí. Y nos carcome. Y lo sabemos. Pero no lo pensamos. Nos pesa, lo padecemos. Eso sí.

En mayor o menor medida, todos pasamos por esto.

Un crítico feroz, un sabelotodo de psicología barata o un demagogo profesional, definiría esto como hipocresía….

Yo también podría hacerlo, pero ¿Qué aporto entonces al tema? ¿Para que pierdo mi tiempo y el de un supuesto lector en hacer una reflexión que lleva siglos vigente?

Supongo que es el MIEDO, pues la hipocresía es consciente. Busca un beneficio en decir lo contrario de lo que pensamos,  mientras que cuando nos negamos a nosotros mismos por el miedo, lejos de buscar el beneficio, lo que tratamos es de encajar con la sociedad, con el grupo, con lo-que-se-supone-que-tiene-que-ser.

Buscar un beneficio vs. evitar un perjuicio (hipocresía vs. Miedo)

¿O es lo mismo?

Sería un buen debate, pero para eso os necesito.